Alfonso Carrera, Laura Calle, Ana Burgos
22 de octubre 2018
La medicina, la ecología y la ética entran en juego en esta compleja cuestión que, en la práctica, tiene una visión principalmente utilitarista: ¿Podemos mejorar la salud de la humanidad al extinguir a especies concretas de mosquito sin que ello altere los ecosistemas aún más, provocando desastres naturales? Sí, es una pregunta con un trasfondo totalmente especista, en el que se anteponen los intereses del ser humano frente al resto de seres vivos.
Esta cuestión surge debido a la reciente noticia sobre la extinción de una población de mosquitos en el laboratorio,gracias a su modificación genética para que sean estériles.
A lo largo de la historia, la humanidad ha tenido pocas contemplaciones en masacrar plagas de ratas, cucarachas, mosquitos y otras especies animales para mejorar la salud de sus poblaciones. De hecho, prácticamente se ha extinguido deliberadamente el virus de la viruela (Variola virus), que sigue almacenado en laboratorios de alta seguridad y estamos luchando para conseguir lo mismo con el virus de la polio (Poliovirus). La diferencia es que ahora se refuerza una posibilidad futura para extender la extinción de especies a otros animales como los mosquitos, en lugar de unos virus.
Cada año, los mosquitos matan a 725.000 personas por su papel en la transmisión de enfermedades infecciosas como la malaria, el dengue, el zika, la fiebre amarilla, el virus del Nilo Occidental... Sin embargo, son solo algunas especies de mosquitos las que son vectores de este tipo de enfermedades. Sólo a los que causan más muertes, por ejemplo, a los mosquitos del género Anopheles y ciertas especies de mosquito del género Aedes. Su erradicación supondría, en principio, la salvación de miles y miles de vidas humanas cada año y la prevención de muchas enfermedades, ya que, a pesar de todo, de las 3500 especies de mosquitos que existen, sólo 200 son hematófagos.
El principal riesgo de extinguir a propósito algunas especies de mosquitos es que no se sabe el impacto medioambiental que podría tener. Otra consecuencia en el caso de que al extinguir a ciertas especies de mosquitos es que otros insectos transmisores de enfermedades sustituyeran su hueco en los ecosistemas, pudiendo empeorar la situación más todavía.
Samper, E. (2018). ¿Deberíamos extinguir a los mosquitos para evitar enfermedades en los seres humanos? El País. Consultado el lunes 22 de octubre de 2018 en https://elpais.com/elpais/2018/09/28/ciencia/1538120943_538691.html
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